El Santuario de María Auxiliadora de Córdoba se inaugura el 24 de septiembre de 1918, fruto del amor de los cordobeses a la Virgen de D. Bosco. Es la primera iglesia en Andalucía dedicada a la Virgen con este título. El año 2007 se le concedió el título de Santuario Diocesano.
Santuario de María Auxiliadora
El Templo
Se accede al Santuario a través un patio o pequeña plazuela cuando no se accede o sale por el patio interior del colegio. La fachada es de arte ecléctico con la embocadura de la puerta neo-barroca y un conjunto de aire andaluz que viene dado por las rejas, el azulejo de la Virgen, los faroles, las vidrieras y el color albero del conjunto. Remata la fachada una maciza espadaña destinada a las campanas.
El Santuario consta de una sola nave que culmina en el presbiterio. El techo de la nave es un vistoso artesonado de estilo neo-mudéjar y de gran valor estético. El presbiterio es de arte ecléctico con rasgos neogóticos, y rasgos neoclásicos en la embocadura del camarín, espacio cuyas sencillas vidrieras le dan un tono alegre complementado por la buena iluminación. Como bajando de la nube del techo del camarín se puede apreciar una paloma que representa al Espíritu Santo sobre la imagen de la Auxiliadora, para indicar que es la mujer “llena de gracia”.
A lo largo de la nave se encuentran las imágenes del Sagrado Corazón, de San José, esposo de María y de San Francisco de Sales, titular de los Salesianos, y las imágenes de Nuestro Padre Jesús Divino Salvador, en su Prendimiento y Nuestra Señora de la Piedad, titulares de la Hermandad Salesiana erigida canónicamente en este Templo.
En el centro del presbiterio se encuentra el altar y el sagrario, reservando en este último parte del Pan Eucarístico, Cuerpo de Cristo para ser adorado y visitado.
A los lados del altar se encuentran las imágenes de San Juan Bosco y Santo Domingo Savio, fundador de la Familia Salesiana y fruto más precioso del método educativo salesiano, respectivamente.
En las paredes laterales del presbiterio se encuentran dos frescos, obra del pintor salesiano Francisco Fuentes. Uno de ellos evoca el famoso sueño de Don Bosco sobre la iglesia representada por una barca zarandeada por las olas pero sostenida con firmeza por dos columnas, la Eucaristía y el auxilio de la Virgen. El otro fresco evoca la bendición de la imagen de María Auxiliadora, el 25 de marzo de 1908.
Las Vidrieras
Las nueve vidrieras son el elemento decorativo más valioso del templo. Fueron construidas en Barcelona en “Rigall Granell y Cía.” con la técnica del emplomado, pintadas y cocidas. Religiosamente ofrecen una excelente catequesis cristológica y mariana.
De las cuatro vidrieras de la nave, la primera es una bonita imagen de María Inmaculada. La segunda representa al Papa León XIII en ademán de invitar a acercarse a María, Virgen del Rosario en postura sedente con el niño de pie sobre las rodillas. La tercera vidriera muestra el Misterio de la Asunción de María. En la parte superior se encuentra la figura ascendente de la Virgen, y en la inferior se encuentran los apóstoles alrededor del sepulcro vacío. La cuarta, está dedicada al misterio de la Visitación de María a su prima Isabel, confirmación del Misterio de la Encarnación de Jesús. En la parte superior aparecen diversos personajes cuidando solícitamente a Isabel, madre en la ancianidad. En la inferior aparece María con el pequeño Juan Bautista en los brazos.
Las dos vidrieras del presbiterio contienen motivos salesianos. La de la izquierda representa a San Juan Bosco postrado ante el Papa Pío IX que le ofrece una bella cinta con la inscripción: “Auxilium Christianorum”, como si le confiriera la investidura de “apóstol” de María Auxiliadora.
La otra vidriera representa a la Virgen Auxiliadora, sentada y con el Niño en los brazos, acogiendo al joven Domingo Savio y en él a todos los jóvenes. En el coro se pueden apreciar otras dos vidrieras: una dedicada a San Rafael, Custodio de Córdoba. La otra representa una imagen de Nuestra Señora contemplada por ángeles.
En la sacristía se encuentra la novena vidriera. Es una bella copia de la Última Cena del famoso artista Leonardo da Vinci.
La imagen de María Auxiliadora
La bendición de la imagen de María Auxiliadora tuvo lugar el 25 de marzo de 1908, por el entonces obispo de Córdoba, el Excmo. Sr. D. José Pozuelo Herrero en presencia de las autoridades de la ciudad. Las crónicas coinciden en afirmar que ese día marca un hito para la Obra Salesiana y para Córdoba.
La imagen es una escultura bellísima, tallada en madera, obra de los Talleres Salesianos de Barcelona-Sarriá. Posteriormente fue decorada y restaurada por el famoso escultor y pintor Juan Martínez Cerrillo en los años sesenta y restaurada en 2005 en los talleres de Nuestra Señora de la Almudena, de Madrid. Entre 2021 y 2022 fue sometida a una profunda intervención por parte de los imagineros Juan Jiménez y Pablo Porras, quienes recuperaron el giro primitivo de la imagen y repolicromaron al completo la talla.
Esta imagen preside y sobre ella gira la historia de la Obra Salesiana de Córdoba. La imagen, que nos remite a la presencia viva de María entre nosotros, es testigo y confidente de incontables alegrías y penas de sus innumerables devotos. Muchos de ellos ingresan en la Asociación de María Auxiliadora, asociación pública de fieles de rango mundial, erigida en esta iglesia en 1913 por el segundo sucesor de Don Bosco, don Pablo Álbera, y agregada a la Archicofradía primaria de Turín fundada por San Juan Bosco.
La imagen fue coronada pontificiamente el 10 de Mayo de 2009 en el Bulevar del Gran Capitán, ante miles de fieles y devotos.
Fuente: www.salesianos-cordoba.net